Durante un servicio dominical realizado en la iglesia Cincinnati en Ohio, Estados Unidos, un hombre con atuendo y maquillaje de mujer se presentó en el púlpito para leer un cuento a los niños.
Según un diario local el sujeto llamado Dan Davidson se presentó en la puerta de la Iglesia Prebisteriana de Mount Auburn para dar la bienvenida a los miembros de la congregación y sus visitantes luciendo un vestido morado, maquillaje, tacones altos y una barba con brillo.
Luego de dar comienzo al servicio dominical tras la canción “Good wWelcomes All”, traducida como “Dios da la bienvenida a todos”, realizada por el coro de la iglesia, este sujeto Dávinson se acercó al púlpito para dar comienzo a la lectura del libro llamado “Pride: La historia de Harvey Milk y La Bandera del arcoiris”.
Muchos niños se acercaron hasta el escenario para escuchar la lectura de este extraño hombre. Mientras Dávinson relata una historia donde todos sueñan un día en vivir en igualdad, donde las personas podrían amar como quisiera.
En otro momento del servicio, un miembro de la congregación se acercó para compartir su historia de atracción hacia otros hombres frente a toda la Iglesia.
Esta congregación está ligada a la Iglesia Prebisteriana de los Estados Unidos la cual apoya los movimientos de orgullo que está manifestando la sociedad. Han destinado una de sus servicios para mostrar su apoyo decorando su propia iglesia con banderas que cubren pasillos y velas de arco iris en el púlpito.
Sin embargo, la Iglesia Prebisteriana de Brasil se mantiene sin conexión con la de los Estados Unidos, las cuáles fomentan estas prácticas humanas antibíblicas.
Estos personajes distorsionan el valor y significado del hombre y la mujer, y suelen presentarse en eventos para niños con el objetivo de fomentar el activismo por la igualdad y por su orgullo alterando y destruyendo los principios cristianos y los valores de la familia. La Iglesia debe estar muy alerta frente a las nuevas doctrinas antibíblicas que se presentan en estos últimos tiempos.
Fuente Noticia Cristiana
Deja un comentario